¿Y qué vamos a hacer en nuestro viaje?

Volvemos a hablar del viaje mientras andamos. Esta vez, haciendo una ruta por la montaña. Parece que siempre hablábamos del tema mientras andábamos porque el tiempo que pasamos en casa estamos siempre trabajando o estudiando.

Comentamos que no queremos que el viaje sea sólo eso, un viaje. Queremos hacer “algo”, aún no sabemos qué.

Después de nuestra experiencia con Escoles Solidaries en Nicaragua tenemos claro que la mejor manera de viajar es estando bastante tiempo en un lugar, conocer a la gente, intercambiar historias... y hemos visto con nuestros propios ojos la importancia de que los niños y niñas de los países empobrecidos tengan la oportunidad de estudiar, lo mucho que se esfuerzan para poder ir a la escuela, y lo necesario que es que les echemos una mano desde aquí. También sabemos que si estamos tan sensibilizados con estos temas es porque hemos estado allí, conocemos a las personas que viven y luchan allí por salir adelante. No son cifras de una encuesta, no son fotografías sin identidad. Son personas con nombre y apellidos, con hijos, con alumnos, con sonrisas, besos, abrazos y lágrimas que aún sentimos si cerramos los ojos y pensamos en ellos.

Desgraciadamente, no todo el mundo puede vivir esa experiencia, pero... ¿y si nosotros pudiéramos acercársela un poco? ¿Y si hiciéramos entrevistas y fotografías a personas de diferentes países, que nos cuenten cómo es su vida, si les ha cambiado la vida el poder ir a la escuela...? Empieza a tomar forma nuestro proyecto, aún sin nombre.