Visita a Amritsar y despedida

Amritsar y Kaphurtala, 9-12-2011

Salimos de casa toda la familia con nuestras mejores galas, a excepción de Vicky y la madre de Rahul, que se quedan trabajando en el puesto de fruta. Sonia y Minu le regalan a Mayte pendientes, anillos, collares y pulseras, y a Javi una cadena, todo dorado. Entendemos que para ellos es importante ir muy arreglados a este lugar sagrado, pero insisten en que no es un préstamo, sino un regalo. La hospitalidad de esta familia no tiene límites.

La carretera sigue cortada, por lo que el taxi en el que vamos tiene que tomar un largo desvío por caminos de tierra que retrasa nuestra llegada.

La visita al templo dorado es muy rápida, pero aún así quedamos impresionados por su belleza y por la solemnidad que allí se respira. El Golden Temple, o Templo Dorado, es un gurdwara o lugar de culto de la religión sij que es la que profesa la familia de Rahul. De hecho, todos los sijs deben visitarlo una vez en la vida. Consiste en una construcción cuandrada rodeada por un estanque, que refleja su fachada dorada creando una sensación mágica. La religión Sij tiene 10 gurús, y fue el cuarto de ellos en el siglo XVI, el que construyo el estaque que ahora rodea el templo. Este estanque da nombre a la ciudad que posteriormente creció alrededor, ya que Amritsar siginifica "Lago del nectar de la inmortalidad". Más adelante otros gurús construyeron el templo, que ha sido parcialmente mejorado y reconstruido a lo largo de los siglos. El color dorado se lo proporciona una cubierta de láminas de oro y en su interior alberga el libro sagrado de la religión sij. El décimo y último gurí sij, a principios del siglo XVIII,  nombró como sucesor definitivo a este libro ya que según él albergaba todo lo necesario para guíar la vida de un sij. El libro es transportado de un lugar a otro del templo al amanecer y al anochecer en una solmne procesión.

Comemos en el comedor comunitario del templo (a todo el que entra a este templo se le ofrece un plato de comida, independientemente de su religión o clase social), aunque poco y rápido, no entendemos por qué. Luego descubrimos que vamos a ir a casa de la familia de Sonia y allí nos han preparado la comida. Estamos un rato con su familia, vamos al bonito templo del pueblo y de vuelta a casa.

Y al día siguiente llega la hora de despedirnos. Sonia lleva a Mayte a su habitación y le regala unas fotos de ella y de Rahul de cuando eran más jóvenes. Como nosotros también llevamos fotos, ella se queda una en la que estamos dos dos con los amigos de Mayte y otra en la que están Mayte y Laura. Los lazos se estrechan cada vez más y ya hace un par de días que las mujeres sueltan alguna lagrimita al pensar en la despedida. Todos nos piden que nos quedemos más tiempo, pero tenemos que continuar con nuestro viaje.

Cuando llega el momento de irnos, lloramos casi todos. Los fuertes y largos abrazos del primer día se repiten, pero esta vez acompañados de lágrimas y de promesas de volver a vernos algún día.

Ahora, además de nuestras familias de España, Italia y Nicaragua, tenemos una en la India.