Llegada a Katmandú

Katmandú, 12-4-2012
Llegar a Katmandú es un poco como estar de nuevo en la India. El ambiente en las calles, los vestidos de las mujeres, los olores... Recordamos las sensaciones del comienzo del viaje y la felicidad que sentimos allí.
Dejándonos llevar por la famosa Lonely Planet, buscamos un hotel en la zona conocida como Thamel. ¡Gran error! Es el núcleo turístico de Katmandú por excelencia. Todo son tiendas con sus insistentes vendedores, hoteles y restaurantes para extranjeros. Por la noche no mejora. Los locales de alrededor de nuestro hotel (el más barato que encontramos) tienen música en directo, que más bien parece un karaoke a juzgar por la calidad de los cantantes que allí actúan. ¡Una pesadilla!
Tenemos claro que no queremos pasar mucho tiempo aquí.
Los últimos días hemos estado bastante agobiados por el tema del proyecto. Seguimos con cosas atrasadas, no damos abasto y, para rematar, muy poca gente entra en nuestra web ahora mismo. Tenemos un momento de crisis en el que nos planteamos dejar de hacer algunas cosas. Nuestro trabajo tiene sentido si llega a sus destinatarios, a la gente en general y en especial a los niños y jóvenes que están estudiando. Pero si nadie lo lee ¿qué sentido tiene? Tenemos que recuperarnos y ponernos las pilas para seguir adelante. Eso es lo que necesitamos ahora: desconectar. Y para ello, lo mejor es justo lo que nos disponemos a hacer: ¡un trekking por los Himalayas!
Así que, nada más llegar, empezamos a buscar posibles recorridos. La tarea no es fácil (Javi ya os explicará el por qué en el siguiente post) y todavía tenemos que comprar algo de material de montaña, aunque hemos cargado con casi todo por media Asia. Que, por cierto, ¡ya tiene guasa eso de pasearnos por las playas de Tailandia con las botas de montaña, el saco de dormir, el forro polar, guantes, gorro, etc.! Lo bueno es que ahora por fin vamos a darle uso. También tenemos que comprar algo de comida, sacar los pertinentes permisos y ¡casi se nos olvida! Hacernos un seguro de montaña. No tiene por qué pasar nada, pero más vale prevenir ya que un rescate en Nepal puede costar unos miles de euros.
En unos pocos días, lo tenemos todo preparado y salimos del hotel con la mochila al hombro ¡Himalayas, allá vamos!
Comentarios
No podeis parar esto ahora!!
Chicos!!animo!!no podeis dejarnos ahora!!supongo q es normal q os flaqueen las fuerzas d vez en cuando,pero no podeis decir q vuestro proyecto no llega a la gente,creo q es lo mas interesante que yo e viato ultimamente y q mis chavales del junior han tenido cercaen mucho tiwmpo,estan deseando conoceros en cuanto volvais con mas tiempo!!
Animo y seguid asi!!es increible q haya en el mundo gente como vosotros.
Un abrazo!!
No te preocupes ;-)
Tranquila Deborah! Esto es de hace tiempo y ya recuperamos las fuerzas! Mañana o pasado publicaremos un nuevo trabajo, aunque sin vídeo (como dijimos, no dábamos abasto con la edición!)
Gracias por apoyarnos siempre.
Un abrazo!
no os rindáis
Tenemos un momento de crisis en el que nos planteamos dejar de hacer algunas cosas. Nuestro trabajo tiene sentido si llega a sus destinatarios, a la gente en general y en especial a los niños y jóvenes que están estudiando. Pero si nadie lo lee ¿qué sentido tiene?
Ya sé que este pequeño momento de desánimo ocurrió hace tiempo, y que afortunadamente ya ha pasado, pero no quería dejar de recordar aquí, aunque ya os lo dije en su momento, cuales fueron mis palabras de ánimo en aquellos días...
Besos y gracias otra vez!
NO TE RINDAS
No te rindas, aún estás a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras,
enterrar tus miedos,
liberar el lastre,
retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros,
y destapar el cielo.
No te rindas, por favor, no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda,
y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños.
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero,
porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Abrir las puertas,
quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron,
vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa,
ensayar un canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas
e intentar de nuevo
celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños.
Porque cada día es un comienzo nuevo,
porque ésta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.
Mario Benedetti
Qué bonito
Precioso Elena... "No te rindas que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños" :-)
Gracias
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