País y gente

Si preguntas qué es lo mejor de Nicaragua, casi todo el mundo responde lo mismo: la gente.

Los nicaragüenses son tranquilos, amables y muy educados. Siempre están dispuestos a ayudar y a dar consejos. Por dónde ir a un lugar, donde comprar comida a un precio más económico... cualquier cosa.

Varias veces nos han invitado a comer amigos de amigos a los que acabamos de conocer. En Little Corn Island nos regalaron cocos y pescado. Unos marineros que nos llevaron de Bluefields a Corn Island nos invitaron a cenar y a dormir con ellos en su barca. Cosas así ocurren todo el tiempo.

Quizás haya algunas excepciones en algunas ciudades. Managua es bastante peligroso, pero descartando a los maleantes, el resto de la gente es igual de amable que en el resto del país. También nos dijeron que en Bluefields hay un ambiente un poco raro, algo hostil, y que hay personas que intentan engañar a los turistas. Pero no es la tónica general del país.

Nos sorprende mucho la forma tan educada de hablar que tienen. Utilizan un vocabulario muy cuidado, con palabras preciosas que en nuestro país ya han quedado en desuso. Utilizan fórmulas muy corteses. Por ejemplo, al entrar a una tienda no te preguntan “¿Qué quieres?”, sino “¿Qué se le ofrece?” Porque, además, casi siempre hablan de usted ¡Incluso a los niños! Y si no hablan de usted, no utilizan el “tú”, sino el “vos”. Tienen una forma de hablar muy bonita. ¡Y apenas dicen palabrotas!

En los más de dos meses que hemos estado aquí no hemos tenido ningún problema con nadie, no hemos visto a nadie enfadado o que nos hiciera mala cara. Los nicaragüenses son encantadores.

Aparte de esto, Nicaragua tiene sitios preciosos para visitar. Aparte de las conocidas ciudades coloniales, como León o Granada, tiene otros muchos atractivos, como por ejemplo la artesanía de Masaya. Pero lo más impresionante de Nicaragua es su entorno natural. Tierra de lagos y volcanes, con una naturaleza exuberante y unas islas increíbles, este país nos tiene enamorados. Recomendaríamos especialmente la isla de Ometepe en el lago de Nicaragua, y Little Corn Island en el Caribe.